Moraleja Green: treinta años creando recuerdos
Este pasado jueves, día 23, las velas comenzaron a encenderse una a una en El Jardín de Moraleja Green. No era una tarde cualquiera: el centro comercial más emblemático del norte de Madrid celebraba sus 30 años de historia, tres décadas que han convertido sus pasillos, terrazas y jardines en parte del paisaje emocional de varias generaciones.

Un acto para mirar al futuro
La jornada conmemorativa comenzó a las seis de la tarde con un acto institucional presidido por Rivoli Asset Management y CBRE, al que asistieron representantes del Ayuntamiento de Alcobendas, junto con la Fundación Ciudad de Alcobendas y la Asociación Embajadores de Alcobendas. La alcaldesa, Rocío García Alcántara, subrayó en su intervención la importancia de Moraleja Green como motor económico y social de la ciudad: “No hablamos solo de un centro comercial, sino de un espacio que ha sabido integrarse en la vida de Alcobendas, acompañando a sus vecinos y reinventándose con ellos”.
El sabor de los treinta años
El restaurante ASTA ofreció un cóctel cuidadosamente diseñado para la ocasión. Canapés que reinterpretaban sabores clásicos, guiños a la cocina mediterránea y una selección de vinos y cavas locales acompañaron las conversaciones distendidas entre empresarios, invitados y representantes institucionales.


La música como hilo conductor
Al caer la noche, el público se desplazó a El Jardín de Moraleja Green para asistir al concierto oficial Candlelight, organizado en colaboración con Fever. Bajo un cielo que comenzaba a teñirse de azul profundo, las velas marcaron el compás de una experiencia sensorial única: un tributo a Coldplay, Queen y Hans Zimmer que llenó el espacio de emoción y nostalgia.

Treinta años contigo
La celebración de este aniversario marca también el inicio de una nueva era para Moraleja Green. El centro se encuentra en plena transformación, incorporando firmas de prestigio internacional y consolidando su identidad como un espacio que trasciende la idea tradicional de centro comercial.
“Estos treinta años son el comienzo de un nuevo capítulo”, señaló un portavoz de Rivoli Asset Management. “Queremos seguir creando un entorno donde las personas vivan experiencias, compartan momentos y se sientan parte de algo más grande”.
Cuando el concierto llegó a su fin, el público despidió a los músicos con un largo aplauso. Muchos asistentes aprovecharon para fotografiar el escenario iluminado por las velas y compartir el momento en redes sociales, mientras otros recorrían el jardín comentando la actuación y el ambiente especial que había acompañado la jornada. Quizás porque, en el fondo, eso es lo que mejor sabe hacer Moraleja Green desde hace tres décadas: crear recuerdos que duran para siempre.



