Entrevistamos a Crys Díaz, la entrenadora de los famosos y ganadora en los Premios Ídolo en la categoría "Health & Sports"
Los Premios Ídolo 2024 han galardonado a importantes perfiles dentro del mundo de los creadores de contenido digital como es el caso de Crys Dyaz ganadora en la categoría "Health & Sports".
En La Moraleja Magazine tuvimos la inmensa suerte de entrevistar a Crys Diaz unos días antes de la gala y aunque a ella no le emociona que la conozcamos como la “entrenadora de los famosos”, la verdad es que actores y actrices, periodistas, influencers… todos quieren entrenar con ella. Crys Dyaz ha pasado de ser una deportista de élite a ser una afamada empresaria del mundo del fitness y el bienestar, creando Crys Dyaz & Co con sedes en La Finca y La Moraleja, y con miles de seguidores en sus redes sociales.
La Moraleja Magazine.- Formabas parte de la selección española de natación, ¿qué trabajo hay detrás de un deportista profesional?
Crys Dyaz.- Esfuerzo, constancia, resiliencia, energía y tiempo. No hace mucho, comentaba en una reunión con mi equipo que gran parte de la capacidad que tengo actualmente para “hacer” y sacar adelante muchas cosas es fruto de esa etapa de mi vida en la que tenía que compatibilizar mis horas de entrenamiento diario, ir a clase, estudiar y sacar tiempo para mis amigos y familiares. Siempre me dicen que parece que mi día consta de 40 horas, quizá por eso exprimo el tiempo al máximo porque llevo haciéndolo desde que era pequeña.
LMM.- ¿Cuándo decides dejar esa vida?
CD.- En el deporte de alta competición hay un punto de inflexión en el que tienes que sentarte a decidir si continúas o si es el momento de dedicarte a otra cosa, aunque puedas seguir entrenando o, como en mi caso, estar vinculada de alguna forma al deporte. Es algo que tenía muy claro, que era ese momento y que todo eso que había aprendido en tantos años en el deporte de élite iba a ser mi herramienta para ayudar a otros. Y encontré en la fisioterapia, y, después en paralelo en el entrenamiento personal, mi futuro.
LMM.- ¿Qué se siente al ser “la entrenadora de los famosos”?
CD.- Como siempre digo ante este comentario, las personas famosas o conocidas representan tan solo un bajo porcentaje de mi trabajo y de mi agenda de clientes. De hecho, puedo presumir de que muchas de las personas que comenzaron conmigo cuando terminó mi etapa de deportista profesional siguen todavía siendo clientes, ya sea a nivel de fisioterapia o de entrenamiento personal. Al entrenar a personas conocidas se hace muy visible nuestro trabajo, que también es importante en un negocio. Me sigo emocionando al verme saliendo en portadas, artículos, entrevistas… y si es gracias a que estas personas famosas que muestran, comparten y hablan tan bien del trabajo que hacemos con ellas, me siento doblemente orgullosa.
LMM.- Tienes miles de seguidores en Instagram, ¿cómo te han ayudado las redes sociales?
CD.- Un poco unido a la respuesta anterior, las redes sociales permiten dar visibilidad a lo que hacemos. Eso lleva consigo una enorme responsabilidad por mi parte, y actuar siempre con la máxima profesionalidad y buscando inspirar y ayudar como único fin. Para mí, el éxito del trabajo no se mide en números de seguidores, pero es algo que nos expone y nos hace más visibles, tanto personal como profesionalmente. Soy activa en Instagram, comparto parte de mi trabajo, del de mi equipo, trabajo con marcas, divulgo información que considero interesante, comparto una pequeña parte de mi vida personal y, sobre todo, me muestro como soy, y hago evidente que nuestro mayor objetivo es la búsqueda de la salud.
LMM.- ¿Te consideras una influencer del deporte y la salud?
CD.- Ojalá pudiera serlo si esa influencia que ejerzo en los demás les empuja a hacer deporte y cuidar su salud. No sé si llamarlo influencer, a mí me gusta más el término “referencer”. Yo también me inspiro en personas, cuentas, empresas, metodologías… y qué bueno es que tengamos este medio para compartirlo, siempre y cuando se use de una forma responsable y profesional. 
CD.- Hace ya varios años que tuve que empezar a tomar decisiones importantes, asumir riesgos, liderar a un equipo que crece exponencialmente, valorar un posible crecimiento, apertura de nuevos centros, mejoras de los actuales… Esa es mi faceta como empresaria: trabajo. Siempre de la mano de mi marido, Rodrigo, quien me acompaña y apoya en cada una de estas decisiones. Me gusta dirigir, liderar, sacar lo mejor de las personas que forman mi equipo, tener una estrategia de empresa, protocolos bien establecidos, retos por cumplir y, a la vista está, seguir creciendo. Me hace feliz mi trabajo, es lo que siempre pienso en esos días agotadores, o en los que se llenan de piedras en el camino, y eso hace que siga trabajando para mejorar, todos los días de mi vida.
LMM.- ¿Tienes otros planes de futuro y/o proyectos que nos puedas adelantar?
CD.- Se me pone la piel de gallina cuando echo la vista a todo lo que nos viene. A veces, las personas más cercanas a mí me aconsejan “parar”, no meterme como ellos dicen en tantas cosas, pero es que cuando algo me ilusiona, voy con todo, como buena Tauro. Y eso hace que, meses después de haber abierto uno de los proyectos más bonitos que hemos sacado adelante, el centro de La Finca, puedo afirmar que en pocos meses podré estar hablando de algo parecido en otro lugar muy especial para mí. Y continuará…